09/05/2023
El colgajo dorsal ancho o latissimus dorsi es uno de los principales colgajos utilizados en cirugía reconstructiva.
El dorsal ancho es un músculo superficial de la espalda que puede ser extraído y movilizado a otro lugar sin apenas producir un déficit funcional para el paciente.
Además, se trata de un músculo bastante grande por lo que nos permite realizar reconstrucciones de grandes defectos.
Se encuentra vascularizado principalmente por la arteria y vena toraco dorsales, aunque también recibe aporte sanguíneo de vasos lumbares e intercostales posteriores.
Este colgajo puede obtenerse como colgajo musculocutáneo o solo muscular, en función del caso, así como colgajo pediculado o libre.
1. Como colgajo pediculado...
Se utiliza, principalmente, en reconstrucción de mama como colgajo formado por piel, grasa y músculo.
Primero, con la paciente de lado, se extrae el colgajo y se sutura el defecto que deja sobre sí mismo, quedando la cicatriz en la espalda oculta por el sujetador.
A través de un túnel en el costado de la paciente, se moviliza el colgajo a la zona de la mama.
Después, con la paciente boca arriba, se realiza el "insetting" del colgajo, es decir, la colocación del mismo y el diseño final que va a tener la mama.
Una ventaja de este colgajo es que aporta tanto piel como volumen. Asimismo, puede combinarse con otras técnicas al mismo tiempo, como un lipofilling o una prótesis para conseguir más volumen.
Además de la reconstrucción mamaria, también se puede emplear para cubrir defectos a nivel de tórax, abdomen, espalda, cabeza y cuello e, incluso, miembro superior.
2. Como colgajo libre...
Se utiliza para reconstrucción de defectos de tamaño moderado-grande en miembro inferior, miembro superior, tronco, cabeza y cuello...
Aquí, se puede utilizar tanto como colgajo musculocutáneo como solo muscular. En este último caso, dado que el colgajo carece de piel, será necesario realizar un injerto cutáneo sobre el mismo.